viernes, 10 de agosto de 2007

NECTAR


Labios sobre labios…. lamiendo, besando. Extrayendo lentamente el néctar del cáliz de la vida….

Es invierno y las flores se revelan bajo el resplandor de las luces de neón de esta ciudad. Sus pétalos blancos y fríos como el hielo despiertan de su largo sueño. Estirándose. Abriéndose palpitantes. Revelando la magia de su interior. Todas las flores son dulces, todas las flores son bellas… en su frialdad nos ofrecen beber de su cáliz… probar de su dulce néctar, embriagándonos con el vino más dulce de la creación. Y volamos como mariposas, buscando saciar nuestra sed interior… nuestros labios se posan ansiosos en los pétalos de cada rosa, endulzando nuestras lenguas con su canción… chupando el néctar de su interior…

Los labios se posan ansiosos haciendo deslizar los pétalos de la flor.
Suave y cadenciosamente, como bailando una canción….
Las lenguas se posan en los pliegues rebosantes de humedad y calor…
empapados por el fuego del néctar de su interior.
Y aspiramos su esencia embriagadora,
perdiéndonos en los recovecos de la pasión más abrasadora….
besando, lamiendo, olvidando todo el dolor.
Cuando las luces se apagan, lo que queda es la pasión…

Y todos los pétalos se abren como danzando una canción…
húmedos, palpitantes, deleitándonos con su sabor.
Ardiendo intensamente en llamas fulgorosas de terciopelo
Crepitando sudorosas cuando develamos sus misterios…
Néctar, cálido jugo de la vida, nos embriagas con tu sabor
Nos esclavizas haciéndonos prisioneros de esta pasión…

Y volando como mariposas, nos perdemos en esta canción,
nuestros labios se posan en los delicados pétalos de las rosas
Embriagándonos con el precioso néctar de su interior
Chupando, lamiendo, sumidos en la pasión más hermosa…
Lenguas explorando ansiosas, lamiendo el néctar de las rosas
Pétalos abriéndose presas del calor de la pasión
Flores de invierno, de pieles frías y sudorosas
Gimiendo, crepitando en la calidez del fuego en su interior.

No hay nada más cálido y placentero que el sabor embriagador de la humedad de los pétalos de una flor….

domingo, 5 de agosto de 2007

Herbert West, Re-Animator


De recuerdos están construidas nuestras vidas. Los hay muy variados, cosas hermosas que vivimos, momentos tiernos y de dolor, despertaras, días en los que solo queríamos dormir, noches en las que solo queríamos mantenernos despiertos…

Gran tesoro son los atisbos que de nuestra infancia conservamos a pesar del paso del tiempo, pues ellos nos han definido en gran medida. Yo soy un “Mostro”, no como galletas ni secuestro niños en mi costal para prepararlos en caldo, sin embargo soy un “Mostro”. Algunos de mis recuerdos más viejos se refieren en alguna medida al Horror, no solo a horrores reales, sino a horrores oníricos plasmados en la pantalla de un televisor o de alguna desvencijada sala de cine. Hoy hablaré acerca de ese tipo de recuerdos. Hoy los llevaré en un viaje de nostalgia por las noches de los viernes en un canal de la televisión mayormente dedicado a la programación infantil… pero que cuando la luna del Viernes caía, se mutaba en una ventana de horrores que nos permitía, ocultos a la vista de mis padres, atisbar a un mundo de horrores que se estableció plenamente en mi, volviéndome al final de cuentas en el “Mostro” que hoy soy…

9:00 pm de un viernes cualquiera en el canal 6 de la televisión local… en la pantalla los títulos de una película de Horror llamada El Reanimador… el color verde en un fondo negro se ciño sobre mi por siempre… la trama era la de Frankenstein, aunque tiempo después supe que se trataba de la adaptación de uno de los relatos del que seria mi mas grande ídolo literario: H.P. Lovecraft. La historia era la de “Herbert West, Re-Animator”… desde luego no es lo mismo ver una película de horror Serie B en la televisión que en el Cine, pero vamos, a los 8 años ni soñando me habrían dejado entrar a una sala de cine a ver algo así, de ese modo, las noches de los viernes a las 9:00 se volvieron algo muy especial, que solo con el paso de los años y la llegada de los Dvd’s o a través de las rentas de videos en VHS en algún videoclub local pudieron igualar.

Esa película me marco, no porque me haya horrorizado realmente, sino por que era tan endemoniadamente divertida! ¿Dije divertida? ¿Puede una película de horror ser divertida? Jaa, todas lo son, Esta en particular guarda un precario equilibrio entre el horror y la comedia que sin duda son los elementos que con el paso del tiempo la han transformado en un completo clásico. La historia es acerca de un joven científico obsesionado con encontrar la forma de dar vida a los muertos y los múltiples experimentos que realiza que al final conducen a una avalancha de muertos reanimados sedientos de sangre. En verdad como adaptación del texto de Lovecraft esta muy alejada del original, pero es envolvente desde el primer momento, es una película que todo aquel que se considere fan del genero debería ver. Las actuaciones son todo lo bueno que podrían ser para una película de horror, con un Jeffrey Combs interpretando al desquiciado Herbert West en un modo tal que le valió ser una leyenda en el mundo del horror, un héroe encarnado por Bruce Abbot en el papel de Dan Cain, y la damisela en apuros llevada a la vida por Barbara Crampton, misma que hizo una de las escenas clásicas del genero, solo similar a la escena esa de Evil Dead donde el bosque viola a uno de los personajes, en este caso tenemos que hay un Dr. que literalmente ha perdido la cabeza por ella, y cuando digo literal es LITERAL! David Gale, en el papel del malévolo Dr. Carl Hill, el cual a pesar de estar muerto consigue seguir teniendo control sobre sus funciones cerebrales y finalmente consigue tener el cuerpo de la pobre novia de Dan Cain para saciar sus mas bajos instintos carnales….

Aahhh, ¿Por qué no hay mas películas así?

Herbert West es mi personaje favorito de las películas de horror, Re-Animator es de mis favoritas y hay muchos motivos por las cuales tú, amable lector de esta porquería de blog deberías de verla si no la has visto. Por la desquiciada sonrisa de Herbert West cuando se dedica a sus experimentos, por el horror de la figura sin cabeza del Dr. Hill cuando se dispone a consumar su venganza, por el pobre gatito muerto reanimado que sirvió para convencer a Dan Cain de ayudar a West en sus experimentos, por la tenebrosa escena donde Megan Halsey es violada oralmente por la cabeza del Dr. Hill, por ese clímax final donde toda una morgue es revivida para sembrar el horro en el campus de la Universidad Miskatonic, la soberbia dirección de Stuart Gordon que jamás dejo que la historia se hundiera bajo el peso de su misma ridiculez… en fin, no es una sugerencia, si eres fan del genero del Horror…

¡Debes de verla!



miércoles, 1 de agosto de 2007

Hogar...


Cuando la lluvia no basta para lavar el pecado... cuando no hay más que esperar en esta cruel espera... cuando todas las ventanas han sido cerradas ya...

Y lo siento surgir dentro de mí… esta furia que no se apaga. Cuando los caminos son inútiles y ya no hay esperanza de redención… El Cansancio llama a mi puerta, pero los sueños no llegan… así que me revuelco arañando esta piel… tratando de llegar a la raíz de cada miedo… a la fuente de mi “¿Por qué?”…

…tengo miedo… el espejo me refleja algo que no quiero…

…necesito encontrar el camino a casa…


El fondo del espejo es negro… es un cañón que me apunta inclemente cuando lo veo… me llama, me pide que me una con el… que sienta el vacío llenar mis entrañas, para que pueda volar libre como el viento… (lo deseo…) lo deseo… Cada vez que me escucho esas voces están cantando himnos hace tiempo olvidados… susurrando quedos a la oscuridad de mis pensamientos… tentándome… llamándome… pidiendo que me una a ellos… y yo soy solo un niño pequeño… perdido mas no encontrado en ningún templo… y mi piel no resiste tantos arañazos… la sangre se ha podrido ya y no fluye mas…

…estoy cansado…

Necesito dormir… necesito encontrar mi verdadero hogar…

Esta noche me iré a casa…. Esta noche finalmente me entregare a la llamada desde hace tiempo recibida…

Cabalgando en el viento más allá de la tormenta… siendo uno al fin con el hogar que nunca fue…